En el ámbito clínico y de la salud, la redacción precisa, ética y coherente de informes psicológicos e historias clínicas es una competencia esencial para garantizar una práctica profesional responsable y de calidad. Este curso ofrece un enfoque integral y práctico que combina los fundamentos normativos, éticos y teóricos con la aplicación directa en contextos reales de atención, fortaleciendo las competencias necesarias para la documentación rigurosa en la práctica psicológica.
El curso está diseñado bajo una metodología participativa y cooperativa, en la que los estudiantes integrarán la teoría con la práctica a través del análisis de casos reales, talleres, simulaciones y debates guiados. Este enfoque, acompañado por docentes con amplia trayectoria en formación clínica universitaria, permitirá desarrollar habilidades para la elaboración de historias clínicas, registros de atención e informes ajustados a las exigencias del entorno profesional.
Como parte de su diferencial, el curso integra herramientas tecnológicas como ChatGPT, orientadas a optimizar la redacción, organización y análisis de documentos clínicos. Los participantes aprenderán a aprovechar estas tecnologías como apoyo para mejorar la precisión, la eficiencia y la calidad del trabajo clínico escrito.
El programa contempla un componente sincrónico de seis sesiones de dos horas y un trabajo autónomo de ocho horas dedicado a la revisión de literatura y ejercicios prácticos. Esta estructura favorece la transferencia inmediata del aprendizaje al contexto profesional, asegurando una experiencia formativa completa y aplicable a los desafíos reales de la práctica psicológica.
Los participantes adquirirán habilidades clave para documentar los procesos psicológicos con rigor técnico, coherencia y sensibilidad clínica, respondiendo a los estándares éticos y legales exigidos por el sector salud.
El curso tiene una aplicación inmediata para psicólogos en formación o en ejercicio, ya que fortalece la capacidad de redactar informes claros, pertinentes y ajustados al contexto de atención, facilitando la comunicación efectiva con otros profesionales y garantizando la trazabilidad de la intervención terapéutica.