Derecho Administrativo Latinoamericano Comparado

El derecho, desde la formación de los Estados-nación en la modernidad, ha sido concebido como una disciplina de carácter nacional, poco abierta a estudios internacionales o comparados. Hoy quien quiera practicar derecho lo tiene que estudiar en el sitio donde lo pretende ejercer. Este nacionalismo no puede ocultar ciertas realidades: los derechos nacionales han estado constantemente entrelazados entre sí; la copia y la imitación normativa e institucional son, posiblemente, la principal dinámica impulsora del cambio y la innovación jurídica. Hoy en día, cuando las sociedades enfrentan desafíos en determinadas áreas, acuden a la comparación para importar o trasplantar ideas que hayan sido efectivas en la solución de los mismos problemas. También es cierto, de otro lado, que cada vez hay una mayor movilización de personas y bienes en la sociedad y la economía globalizadas. Se multiplican, por tanto, las transacciones y los conflictos transnacionales, así como existe una mayor oportunidad para entrar en contacto con las formas y procesos normativos bajo las cuales viven pueblos en todos los rincones del mundo. En la medida en que estos procesos de trasplante normativo y de globalización son frecuentes, los juristas tienen la clara necesidad de iniciarse en estudios de derecho comparado. 

Esta manifiesta realidad no ha tenido mayor impacto sobre el currículo de las facultades de derecho en América Latina. La razón de esta impermeabilidad radica en que el abogado parece estar preocupado mayoritariamente con los problemas prácticos que genera su propio derecho interno. Es precisamente esta cuestión, la de formar y consolidar una dogmática nacional en las diferentes áreas del derecho, la que ha concentrado los esfuerzos de las últimas generaciones de abogados en Colombia desde el establecimiento, en el siglo XIX, de los principales códigos nacionales. Pero, cada vez más, la cultura jurídica contemporánea parece exigir que se desborden los presupuestos y límites de los distintos “positivismos nacionales”.  

Por “positivismo nacional” puede entenderse la noción según la cual el derecho es básicamente un sistema de normas positivas que rigen dentro de los confines de un territorio estatal y que, para todos los efectos prácticos, corresponde a los órganos de ese estado monopolizar soberanamente la creación, interpretación, modificación y derogación de ese derecho. Esta visión nacionalista del derecho es puesta en duda por las dinámicas de la globalización económica y cultural que experimenta el mundo.